En 1893 el geólogo Alfrid Stasmed realiza en territorio riojano un gran hallazgo: los campos de Talampaya. Transcurrieron más de 70 años hasta que en la década del 40 el Dr Juaquín Frenguelli aporta valiosa información captando en interés de geólogos y paleontólogos de todo el mundo. El hallazgo de fósiles animales y de flora, así como los estratos geológicos analizados responden a los acontecimientos que tuvieron lugar en el período triásico de la era mesozoica hace 225 millones de años d9onde los reptiles eran los dueños de estas tierras. La formación del cordón cordillerano acontecida hace 60 millones de años, dejó al descubierto este curioso relieve constituido por arcilla y areniscas compactadas con una visible precencia de óxido de hierro que es el que determina la coloración rojiza de los paredones que afloran en el área. El termino talampaya tiene muchas acepsiones, pero la mayoria de los autores coinciden en la siguiente interpretacion "río seco del tala". en 1975 el gobierno de la provincia de La Rioja crea el parque provincial Talampaya. luego en 1997, a través de una ley otorga los derechos del lugar a la administración de parques nacionales para que se lo declare Parque Nacional. finalment, el 29 de noviembre del 2000 es declarada por la UNESCO Patrimonio Natural de la Humanidad ya que además de ser un ámbito particularmente bello atesora un ecocistema que en pocos lugares del mundo se puede obsrvar. Además, muestra las distintas capas que componen el terreno formando una sucesion completa del triásico, dandole esta particularidad su caracter de "unico en el mundo".
EL cañon de Talampaya:
El cañon de talampaya es un obsequio d la naturaleza y de nuestras generaciones pasadas que trascienden nuestra existencia. Su belleza y su tamaño nos hace sentir pequeños ante su majestuosidad.
En sus apacibles espacios usted encontrará la tranquilidad que busca para relajarse de una vida agitada por las ocupaciones y responsabilidades.
Tomese el tiempo para disfrutar de este paisaje y conocer su mística y energía obsrve el emocionante juego de luces y sombras que se producen durante el paseo, siente el sol y el viento sobre su rostro en cada uno de los recorridos. Podrá vivir la experiensa, unica e increíble, de seguir el vuelo de los cóndores desplegando sus alas para abrazar los paredones del cañon. Y admirar en un amanecer o en un atardecer, los rayos del sol iluminando estas singulares tierras rojizas.
Comprenderá que este gran paisaje, formado por la erosión del viento y del agua, nos trasmite un sentido de humildad que nace de las interconexiones de todas las formas de kla naturaleza y del deceo de cuidar estas tierras.
Como seres humanos debemos asegurarnos de que las generaciones futuras tengan la oportunidad de crear sus propios vínculos con el cañon de talampaya.
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